Ya han pasado casi ocho años desde que terminé mi vuelta al mundo en bicicleta, una travesía que duró trece años y que me llevó a recorrer 117 países. Aunque el viaje físico concluyó, las lecciones que aprendí durante esos años quedaron grabadas en mi piel, en mi memoria y, sobre todo, en mi alma.
Son ya tan parte de mí como lo es mi forma de hablar con metáforas e imágenes.
Sin embargo, no fue hasta hace poco que me di cuenta de la profundidad de las enseñanzas que obtuve viajando. Este libro es el resultado de ese proceso de reflexión, de ese ejercicio de girar el cuello y mirar hacia atrás con la claridad que solo el tiempo y la distancia pueden brindar.

Cuando terminé el viaje, no me senté a revisar fotografías o videos de aquellos años. No viví anclado en el pasado, como si aquella experiencia fuera lo único y más radical que podía definir mi vida. Al contrario, seguí adelante, continué viviendo como un nómada, pero esta vez en una autocaravana.
Debido sin embargo a mi trabajo como conferenciante me he visto obligado a volver una y otra vez a esas vivencias, a revivir aquellos momentos y a compartirlos con audiencias de todo el mundo.
Fue en esas conferencias donde comencé a darme cuenta de algo que no había percibido al terminar la vuelta al mundo: el viaje no solo me había llevado a conocer el mundo, sino, sobre todo, a mi mismo.
Cada pregunta de la audiencia, cada reflexión compartida, cada historia contada me llevó a entender que aquella experiencia de trece años no fue solo una gesta de cara al exterior, sino también un viaje interior. Algo mucho más profundo que definiría en el futuro quién soy, qué hago y, más aún, porqué hago las cosas que hago.
Contenido del nuevo libro
Y este libro se trata de ese viaje interior.
No esperes por ello encontrar aquí un recuento de mis hazañas sobre dos ruedas. Es una exploración de las lecciones que aprendí, de las cicatrices que me marcaron y de las verdades universales que descubrí en el camino. Pero, ¿por qué esperar tanto para escribirlo?
Porque considero que un libro de aprendizajes solo es creíble una vez que lo aprendido ha sido aprehendido.
Al igual que un café elaborado en una cafetera francesa, que necesita reposar para que el polvo sedimente y pueda ser degustado con placer, las lecciones de la vida también necesitan tiempo para asentarse. Durante años, las experiencias más livianas, las anécdotas superficiales, se fueron desvaneciendo, dejando espacio para que emergieran las enseñanzas más profundas, aquellas que tendrán eco en tu devenir.
Los últimos años han sido ese proceso de sedimentación para permitir que lo esencial aflore.
Estoy lanzando una preventa del libro. No tienes que pagar nada. Solo dejar un comentario en este artículo diciendo: lo quiero o cualquier otra cosa que te apetezca.
Mis otros libros
Si has leído mis otros libros, es posible que reconozcas algunas de las historias que comparto aquí. Sin embargo, ahora trato de exprimirlas aún más, de extraerles todo el jugo posible y ponerlas sobre la mesa para que puedan ser diseccionadas a la luz de quien desea aprender y comunicar sus propios aprendizajes. Este no es un libro de aventuras; es un libro de reflexiones, de preguntas y de respuestas que surgieron después de miles de kilómetros pedaleados.
Y de muchas horas en silencio.
Sigo huyendo de las multitudes, de las fiestas y celebraciones, de los atascos, de las masas y las misas, de los viajes de pulserita y, en estos últimos años, también de las redes sociales.
La aventura del conocimiento
Hace cuatro años, decidí estudiar Filosofía en la Universidad. Fue una decisión que cambió mi forma de ver el mundo y de entender mi propio viaje. Me sorprendió descubrir que muchos filósofos, a través de la profunda reflexión, habían llegado a conclusiones muy similares a las mías. La diferencia es que yo no llegué a esas ideas a través de libros o teorías, sino a través de muchas horas en el sillín de mi bicicleta.
Lo que nos une, a esos filósofos y a mí, es un deseo irrefrenable de preguntarnos por el sentido de la vida, de no conformarnos con las respuestas de otros y de buscar nuestras propias verdades. Puede que, al final, todos lleguemos a las mismas respuestas, pero lo importante es el camino que cada uno toma para llegar a ellas. De la misma manera, es posible que muchos de los aprendizajes que comparto aquí ya los hayas experimentado en tus propias carnes. No son lecciones exclusivas mías; ya he dicho que son verdades universales. No pretendo atribuirme el mérito de haberlas descubierto; solo deseo exponerlas de forma clara y distinta, y con ello acercarme a la verdad de las cosas, como hizo Descartes en su Discurso del método para concluir: “yo pienso, luego soy”.
Aprovecho este apunte teórico para prevenirte de que encontrarás algunas citas filosóficas y referencias a algunos autores. En unos casos lo entenderás y en otros no, pero te animo a que sigas leyendo, porque si solo lees lo que no requiere esfuerzo, ¿cómo va a mejorar tu entendimiento?
Sin embargo, este libro no es una recopilación de teorías filosóficas o de ideas prestadas de otros autores. Es el resultado de mis propias cicatrices, de las caídas y los resbalones, de los momentos de duda y de los instantes de claridad. Es un libro escrito desde la honestidad, desde la convicción de que las lecciones más valiosas son aquellas que se aprenden en el camino, no en los libros.
Estas páginas son la forma que he encontrado para compartir contigo esas lecciones, para invitarte a reflexionar sobre tu propio camino y para recordarte que, al final, lo importante no es el destino, sino el viaje en el que estás inmerso.
El destino es el cementerio y ya sabes que está lleno de soñadores, de personas que pensaban que iban a vivir unos años más para cumplir sus sueños.
Pero los sueños no se tejen de razones sino de intuiciones.
Disfruta de la lectura.
Paz y Bien, álvaro neil el biciclown.
P.D. El libro que estoy escribiendo sobre la muerte no ha muerto, tan solo está en reposo. Creo que debo escribir primero este libro de aprendizajes. La idea surgió hace dos días y desde que la he tenido no he podido separarme del teclado del ordenador.
Hola Alvaro. Cuando hay un pastel en el horno, se huele. Que aroma se huele cuando se escribe un libro?
Buenas noches Álvaro, me encantaría tener ese libro 🫶🏻